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O Dios de Amor,
danos amor, te pedimos,
amor en nuestros pensamientos,
amor en nuestro hablar,
amor en nuestras acciones, y
amor en lo secreto de nuestras almas.
William Temple
Eterno Padre de mi alma,
permite que mi primer pensamiento de este día se dirija a Ti,
que mi primer impulso sea adorarte,
que mi primera palabra sea tu nombre,
que mi primera acción sea arrodillarme delante de Ti en oración.
Por tu perfecta sabiduría y tu perfecta bondad;
por el amor con que Tú amas a la humanidad;
por el amor con que me amas a mí,
por la grande y misteriosa oportunidad de mi vida;
por la presencia de tu Espíritu en mi corazón;
por los múltiples dones de tu Espíritu,
te alabo y adoro, oh Señor.
John Baillie
Señor, tú has comenzado el asunto, tú me has dado tu Santa Palabra, y me has recibido
entre las personas que forman tu pueblo, las que te conocen, te alaban, y te glorifican.
Así, pues, concédeme a mí la gracia de quedarme fiel a tu Palabra; ilumina mi corazón y
acláralo para que otros hallen consuelo y gozo.
Martín Lutero
Oración de la reforma
Señor, reforma a tu iglesia.
Dios de la Fe, de la fe que justifica,
nos perdona, nos reconcilia y nos incorpora
a tus actos de justicia en el mundo,
reforma la fe de tu iglesia.
De manera que podamos creer, confiar, esperar
y trabajar por la justicia, la paz y la
integridad de la creación.
Dios de las Escrituras, que te revelas en
el testimonio de tus actos de amor y no en
palabras muertas, reforma el mensaje de tu
iglesia para que nuestro testimonio sea tu
Palabra viva y vivificante.
Dios de la Gracia, que sobrepasa toda ley y
todo sistema opresor, que nos acoge y nos
acepta, que sana nuestras heridas, reforma
nuestro corazón para ser una iglesia de gracia
y perdón, que promueva la libertad, la vida digna,
la vida plena.
Amén.
Te celebramos, oh Dios de la Vida
En medio del ruido de nuestras ciudades,
te celebramos por el regalo del silencio.
En medio de los tonos grises de nuestros hogares,
te celebramos por el regalo de los colores.
En medio de nuestras relaciones distorsionadas,
te celebramos por tu regalo de la vida abundante.
En medio de las jerarquías de nuestra sociedad,
te celebramos por tu creación de iguales.
En medio del abuso del poder y el dinero,
te celebramos por tu regalo de justicia.
En medio de una realidad en donde todo viene con precio,
te celebramos por tus regalos de vida en abundancia.
Te celebramos, oh Dios de la Vida